Duarte dejó no sólo deudas, sino obras inconclusas

Por Diario de Xalapa | Lunes, Diciembre 5, 2016

Itzel Molina/ Danytza Flores

La administración que inició el exgobernador Javier Duarte de Ochoa, quien no sólo es conocido a nivel internacional por ser prófugo de la justicia, sino además por generar una deuda estatal mayor a los 87 mil 927 millones de pesos, dejó en la Entidad diversas obras inconclusas, incumpliendo así con sus promesas.

Por más de cinco años Duarte de Ochoa realizó diversas promesas a los veracruzanos, sobre todo aquellas relacionadas con la generación de espacios para la salud, mejoramiento de infraestructura y reparación o construcción de vías terrestres, pero no fueron cumplidas. Algunas de esas obras vienen desde la administración de Fidel Herrera.

Entre las más representativas se encuentran el túnel sumergido en Coatzacoalcos (iniciado en la administración de Miguel Alemán), la autopista Córdoba–Xalapa, el hospital regional de Perote, el centro de salud de la comunidad de Acocota del municipio de Acajete, el puente del libramiento a Cardel y la Torre Pediátrica, éstos últimos se iniciaron en la administración de Fidel Herrera Beltrán; sin  embargo,  Duarte de Ochoa aseguró que los concluiría, lo que no sucedió.

TÚNEL SUMERGIDO

El túnel sumergido de Coatzacoalcos, que inició con la administración de Miguel Alemán en el 2003 y continúo durante el mandato de Fidel Herrera Beltrán, quedó bajo la responsabilidad de Javier Duarte de Ochoa, mismo que en el 2015 anunció la conclusión del proyecto antes del cierre de su titularidad del Ejecutivo estatal.

La finalidad del túnel sumergido es conectar a Coatzacoalcos con la  Villa de Allende y Zona de Complejos, ya que tendría una longitud de 2 mil 280 metros y sería de cuatro carriles.

Denominado como un proyecto único a nivel nacional, el túnel sumergido se eligió debido a que la realización de un puente que atravesara el río Coatzacoalcos para conectar a las comunidades con el municipio representaría un problema para los barcos de gran calado.

La obra que inició en el 2003, y que hasta julio de 2016 había generado un gasto de 3 mil 300 millones de pesos en los tres sexenios, no ha sido concluida. Pese a que el 8 de septiembre el entonces gobernador Javier Duarte de Ochoa en conferencia realizada en la sala de banderas de Palacio de Gobierno se comprometió a cumplirla.

El 22 de agosto del año en curso, el ayuntamiento de Coatzacoalcos dio a conocer que la construcción detenida en julio pasado por falta de recursos se reanudaría en dos o tres semanas para quedar concluida en doce meses, es decir, hasta septiembre de 2017.

La empresa “FCC” de origen español ganó la concesión para construir el túnel; sin embargo, fue adquirida por Grupo Carso, S.A. de C.V, propiedad de Carlos Slim.

AUTOPISTA CÓRDOBA-XALAPA

El 4 de febrero de 2013, en la comunidad de Chichicaxtle del municipio de Puente Nacional, Javier Duarte de Ochoa dio el banderazo de inicio de la construcción de la autopista Córdoba-Xalapa y la creación del puente “Prosperidad”, obras que tendrían un costo de 2 mil millones de pesos.

A través de Diario de Xalapa, se informó (http://www.oem.com.mx/diariodexalapa/notas/n2868169.htm) que el mandatario veracruzano aseguraba que el puente “Prosperidad” sería el más moderno del país, ya que vincularía la zona sur con el centro y norte a través de la autopista Tinaja-Cosoleacaque, que funciona como ruta del tránsito de largo itinerario hacia el altiplano y el resto del país, vía libramiento de Xalapa.

En tanto, la autopista Córdoba-Xalapa sería de 71 kilómetros, pues además de unir a Xalapa y Córdoba, permitiría un acercamiento con los municipios de Cuitláhuac, Paso del Macho, Camarón de Tejeda, Soledad de Doblado, Paso de Ovejas y Puente Nacional.

Actualmente ahí, donde se “comenzó” la obra, sólo hay tierra y monte.

En la entrada que se utilizó para el banderazo de inicio de obra, cercana a la comunidad de Chichicaxtle, fue colocada una reja con cadenas, anunciando que el área es utilizada por una empresa privada.

En el terreno se ubicaban algunas máquinas con las que se extrae tierra, arena y grava, una construcción pequeña, así como dos vehículos, pero ninguna persona acudió al llamado que se realizó para solicitar información.

Los pobladores de Chichicaxtle dieron a conocer que desde hace un par de años, la empresa se dedica a la extracción de tierra, arena y grava, además de que en ningún momento se inició la construcción de la vía carretera prometida.

“La única vez que se aparecieron las autoridades fue cuando se anunció la construcción, desde entonces, nadie vino ni siquiera a tomar medidas, sólo prometieron esa carretera, pero nunca hicieron movimiento alguno por cumplir”, señaló Pedro Domínguez, vecino de la zona.

PUENTE A LA MITAD

La construcción del libramiento a Cardel inició en 2008 y en ese entonces, el secretario de Comunicaciones Marcos Theurel Cotero señaló que tendría un costo de 450 millones de pesos y se concluiría en 2009, pero fue hasta el 2013 que dicha obra se entregó con la falta de un puente.

En agosto de 2010, el entonces gobernador Fidel Herrera Beltrán inauguró la primera etapa del libramiento; sin embargo, quedó pendiente la edificación de un puente ubicado a la altura de San Pancho del municipio de La Antigua. Duarte nunca lo continuó.

Dicho puente, que fue visitado por Diario de Xalapa, se encuentra inconcluso, a pesar de que las entradas hacia el mismo están en condiciones adecuadas para transitarse.

El puente serviría para que los conductores que tuvieran la intención de evitar el tráfico en la zona de Cardel lo utilizaran para llegar a incorporarse a las carreteras Cardel-Poza Rica o Cardel- Veracruz.

En el lugar se encuentran los cimientos de lo que sería la unión del puente con el asfalto, pero la obra se quedó sin terminar.

HOSPITAL REGIONAL DE PEROTE

En obra negra, sin equipo, cableado de luz y rodeado de vegetación se encuentra el inmueble de lo que sería el hospital regional de Perote, obra prometida por Duarte de Ochoa.

Este espacio no fue posible concretarlo ya que según el alcalde con licencia de Perote, Paul Martínez Marie, la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) no depositó los recursos para la conclusión del nosocomio que se encuentra en un 60 por ciento.

El hospital tendría 50 camas y brindaría consultas de especialidad para más de 50 mil personas de la región de Perote, Las Vigas y Villa Aldama.

Para la construcción de este nosocomio se destinarían 208 millones 732 mil 723.10 pesos, cantidad de la cual únicamente se entregó el 50 por ciento a la administración municipal de Perote, correspondiente a 104 millones 366 mil 361.55 pesos.

El inmueble, que está en completo abandono, es vigilado las 24 horas por personal del IPAX, mismo que está a cargo del hospital civil de Perote. “Nosotros sólo nos encargamos de la vigilancia las veinticuatro horas para evitar que se metan las personas, lo utilicen para tomar, hacer fiestas o cualquier tipo de alboroto, a nosotros nos contrató el hospital civil, pero la verdad no sabemos si algún día se termine, creemos que no, pero es nuestro trabajo cuidar”, comentó la persona que se encontraba de guardia el día de la visita al lugar.

Dada la falta de uso de la construcción, el nulo mantenimiento y la continuación de los trabajos, el inmueble presenta daños en su infraestructura, tales como cuarteaduras, conexiones de luz caídas, paredes y tubos enmohecidos, cristales rotos y puertas sin chapas.

El inmueble está rodeado de vegetación, por lo que se puede comprobar que no se ha realizado la poda desde hace varios meses.

CENTRO DE SALUD

El gobierno de Javier Duarte prometió construir un centro de salud en la comunidad de Acocota del municipio de Acajete, cuya inversión sería de 5 millones de pesos, monto que fue aprobado con el “Programa de Apoyo para Fortalecer la Calidad de los Centros de Salud” (Paforss) a través de la Jurisdicción Sanitaria V de la Secretaría de Salud del Estado.

El alcalde de Acajete, Ranulfo Eleazar Hernández Rodríguez, informó que los recursos fueron retenidos en la Sefiplan, motivo por el cual no se logró la edificación de este inmueble destinado a la salud y que beneficiaría alrededor de 2 mil 500 personas de las comunidades de Acocota, El Quemado, El Encinal I, Barranquillas, Cuesta del  Vaquero y Patamoles.

Ante la necesidad de recibir atención médica, en la comunidad se estableció un consultorio en el salón social, mismo que cuenta con techo arqueado, carece de pintura y presenta  signos de moho en los entronques de la lámina con los clavos que se utilizaron para sujetar a las vigas.

Para acondicionar el espacio como consultorio se colocaron láminas de zinc y se realizó un tipo de cuarto con una puerta sujetada a un marco de madera. Ahí el médico y el enfermero se encargan de dar consulta a la población que asiste de lunes a viernes.

Junto al salón social se encuentra un terreno de alrededor de veinte metros cuadrados, lleno de pasto y rodeado con una maya de color verde. En éste se pretendía construir el centro de salud que a la fecha sólo es un sueño para los pobladores de esta comunidad.

TORRE PEDIÁTRICA, 10 AÑOS DESPUÉS SIGUE SIN CONCLUIRSE

Por su parte, la Torre Pediátrica que se construye a un costado del Hospital Regional de Alta Especialidad de Veracruz es una de las grandes obras transexenales que no pudo ser concluida por la administración estatal.

Fue heredada por el exgobernador Fidel Herrera Beltrán y  Javier Duarte de Ochoa prometió en reiteradas ocasiones que sería concluida antes de finalizar su sexenio.

En el proyecto inicial se anunció una inversión por el orden de los 244 millones de pesos, presupuesto que fue etiquetado y liberado en 2008.

Sin embargo, el atraso de casi 10 años en su construcción y la falta de transparencia en el manejo de los recursos provocaron que el monto casi se duplicara.

Apenas en enero pasado el entonces secretario de Salud, Fernando Benítez Obeso, luego de un año y seis meses que se mantuvo detenida la obra, dio a conocer que se necesitaban poco más de 250 millones de pesos para poder terminarla.

En ese momento el funcionario detalló que el avance en la construcción de la clínica de especialidades pediátricas era del 60 por ciento; faltaba terminar parte de la obra civil del edificio e instalar el equipamiento médico requerido.

Desde entonces los trabajos se mantienen completamente paralizados y el deterioro en el edificio por el abandono en el que se encuentra es evidente.

Este medio requirió información sobre el avance de la obra en el área de Comunicación Social del Hospital Regional de Alta Especialidad de Veracruz, que se supone tendría a su cargo la Torre Pediátrica, pero no se pudo concretar una entrevista con el director del nosocomio, Nicolás Chantiri Pérez.

Tampoco se brindó una explicación de la negativa a otorgar información al respecto o si la falta de esa infraestructura causaba algún tipo de impacto por saturación en los servicios que brinda el hospital.

El último dato oficial sobre el proyecto fue concedido por el entonces secretario Benítez Obeso el 19 de septiembre pasado, cuando reconoció que la obra no sería concluida por la administración.

Argumentó que la obra se atrasó debido a que las empresas contratadas presentaron inconsistencias administrativas que tuvieron que aclararse antes de seguir con los trabajos.

ONG RECLAMÓ POR TORRE PEDIÁTRICA

En el 2014, después de seis años de atraso en la construcción de la Torre Pediátrica, la Asociación Mexicana de Atención a Niños con Cáncer (AMANC) señaló que era necesaria la culminación de la obra para poder dar una mejor atención a los niños que son apoyados por la agrupación, dado que el espacio en el Hospital Regional de Veracruz comienza a ser insuficiente.

AMANC indicó que en ocasiones no se cuenta con el instrumental para realizar estudios e incluso con medicamentos que se necesitan con urgencia.

A los reclamos se sumaron integrantes de la Agrupación Michou y Mau que argumentaron que el espacio destinado en el Hospital Regional para atender niños quemados era ya obsoleto y obligaba a realizar traslados a otras ciudades en casos graves.

En el 2012 el entonces diputado local Oscar Lara Hernández presentó un punto de acuerdo para que se revisara el motivo por el cual la Torre Pediátrica no había sido concluida; no obstante, éste no fue motivo de ninguna acción.

El proyecto original de la Torre Pediátrica consta de diez niveles con capacidad para 223 camas, ocho quirófanos y 12 consultorios, en un total de 13 mil 140 metros cuadrados.

La misión principal de construir la Torre Pediátrica se suponía que era mejorar y brindar atención de calidad a niños y adolescentes que requirieran atención médica, ya que el espacio en el Hospital Regional resultaba insuficiente.

Se supone que contaría con áreas de urgencias, hidratación oral, consulta externa, aulas de enseñanza, admisión hospitalaria, inhaloterapia, hemodiálisis y diálisis peritonial, cardiología, nefrología, oncología, unidad de terapia intensiva, terapia intermedia, cuidados neonatales, cirugía, así como área de quemados.

Además, permitiría la renovación e instalación de equipo de imagenologia de última generación, lo cual ubicaría a esta clínica como una de las mejores del país.

Ahora el proyecto tendrá que ser concluido por el próximo gobierno que entró en funciones el pasado 1 de diciembre; sin embargo, los recursos utilizados no pudieron ser aclarados hasta ahora.