Retórica del odio desató el lado oscuro de la naturaleza humana en 2016: AI

El año 2016 reveló “el potencial de la retórica del odio para desatar el lado oscuro de la naturaleza humana”, y en él “ninguna parte del mundo se libró de medidas de represión general de la disidencia”, concluyó Amnistía Internacional en su informe anual sobre la situación de los derechos humanos en el mundo.

La organización destacó la “venenosa retórica de la campaña de Donald Trump”, los asesinatos de más de seis mil personas en Filipinas con motivo de la guerra contra las drogas librada por el presidente de aquel país, Rodrigo Duterte, y el asesinato de la ambientalista hondureña Berta Cáceres, como muestras del rechazo global de los derechos humanos.

“Algunos de los sucesos más inquietantes de 2016 fueron fruto de un nuevo pacto que ofrecieron los gobiernos a sus ciudadanías: la promesa de seguridad y mejora económica a cambio de ceder derecho de participación y libertades civiles”, dijo el secretario general de Amnistía Internacional, Salil Shetty, en el prólogo del informe.

Shetty citó como ejemplos el despido de 90 mil empleados del sector público en Turquía, por presuntos vínculos con organizaciones terroristas, el control de los medios de comunicación por parte de los gobiernos de Corea del Norte e Irán, y la nueva Ley de Poderes de Investigación del Reino Unido, que aumentó significativamente las facultades de las autoridades para interceptar comunicaciones de ciudadanos.

“Es en estas épocas cuando hacen falta voces valientes, héroes corrientes que se alcen contra la injusticia y la represión (…) 2017 necesita héroes, héroes de los derechos humanos”, añadió Shetty.

Sobre México, Amnistía Internacional señaló que persiste la impunidad en violaciones a derechos humanos y llamó la atención sobre intensas campañas de difamación contra activistas y la violencia contra las mujeres.